¡Se dice fácil!!!!!
Lo cierto es que ya hace tres décadas y media, que estuvimos en aquel acto masivo, sentados todos en el área destinada al parqueo principal de la escuela.
¿Se acuerdan?
Estábamos muy emocionados.
Nuestra escuela se veía nuevecita, reluciente, todo pintado y limpio, cuidado...
Desde un curso antes, los de las tres primeras graduaciones, junto a los profesores, trabajadores no docentes y constructores, nos habíamos esforzado muchísimo para concluir las obras.
Faltaban algunos detalles, pero por fin se inauguraba y en todo el país sería la noticia principal.
Era el orgullo de nuestros padres, la esperanza de muchos niños y familias, porque no se trataba de una escuela más, sino de la mejor.
Y en estos días son muchos los vocacionales que estamos recordando este acontecimiento y preparándonos para celebrar en grande el 40 aniversario y, ¿por qué no? el 50, el 60 y cuantos la vida nos dé por festejar de nuestra inolvidable y querídisima escuela.
Es momento de reencuentros, de buenos recuerdos y también de sueños, como el de vernos muchos de nosotros otra vez allí o el de devolverle su esplendor, no sólo a las edificaciones, sino la altísima calidad de la formación.
Ver:
Efemérides
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